Un zancocho

La clase de hoy estaba programada para ser una clase normal, incluso me había preparado un repasillo de oraciones que los alumnos ya deberían saber perfectamente para refrescarles la memoria para el examen de mañana. 

Pero no sé si ha sido el cambio horario, la primavera que la sangre altera, que era última hora y hacía calor o que mañana tienen el examen a primerísima hora de la mañana, la cuestión es que esta vez no solo se me ha descontrolado la situación por completo, sino que además se ha notado, jaja. 

Cuando nada más entrar varios alumnos me decían que tenían dudas yo me he puesto muy contenta ya que habían estudiado este fin de semana como les dije que hicieran a cambio de no mandarles más oraciones. Pero cuando las dudas han empezado a caer como una tormenta tropical no ha sido tan bonito. 

Entre el aluvión de preguntas, el querer hacer las cosas más rápido de lo que podía yo hacer (y de lo que mis pobres alumnos podían seguirme), las múltiples y variadas formas de análisis sintáctico de nuestros queridos teóricos que son incapaces de ponerse de acuerdo incluso en terminologías sencillas, mi tutor metiendo cizaña con sus comentarios y liándola más parda, los alumnos metiéndose y sacándose mano unos con otros, volviendo al tema y volviéndose a perder, yo a última hora cansada y pasando un calor tremendo (¿por qué el día que no hace falta encienden la calefacción a tope?) y los ejemplos rebuscadísimos que puse...

CHAOS!!! Me he metido en el lodo hasta las orejas, ahora me río, pero ahí no sabía cómo salir del hoyo. 

Al final, creo que la cosa se ha más o menos encauzado aunque hemos terminado saliendo más de 10 minutos tarde del aula entre preguntas y comentarios acerca del examen y de los análisis sintácticos. Mañana veremos en el examen... no sé si sentirme bien o mal. Hasta ayer estaba confiada en que era un examen fácil en el que todos aprobarían con buena nota. Ahora tengo dudas. 

Pero lo hecho, hecho está; y como las fotocopias están hechas y nos controlan en el instituto el número que hacemos... tendrán que contentarse con lo que les ha tocado. 

ALEA IACTA EST

Buena suerte, niños míos,

os desea lo mejor vuestra profe.