miércoles, 8 de febrero de 2012

Una de médicos

Cuando yo era más joven, el médico que hay en mi barrio era el que había estado siempre, como si hubiera sido el único médico del pueblo desde tiempos inmemoriables (debía ser aún joven y todo el hombre por aquel entonces). 
De este médico, mucha gente se quejaba y yo absorbí su malestar y también me quejaba de él. Había más problemas con él de los típicos: algunos pacientes cogían un capazo y pasaban media hora hablando con el señor doctor sobre sus temas personales o quién sabe qué hacían... Otras veces la gente se quejaba de que se equivocaba de recetas y en lugar de darte paracetamol te recetaba tan frescamente unos anticonceptivos orales. Algunas particularidades de este hombre que sufrí yo fueron "tengo las anginas inflamadas, mocos, me duelen los oídos..." y el hombre directamente te recetaba 4 cosas sin mirarte. Qué confiado el hombre, o te pasa algo más grave y...
Por otra parte, también tenía fama de que tú llegabas a su consulta y le decías "recéteme un medicamento extrañísimo", y te lo recetaba; "quiero visita para el especialista con más cola que tenga" y te daba el volante, o incluso a un familiar tuyo, si total, no te va a mirar..., y si insistías te lo daba con urgencia. Así que, incluso gente de otras comunidades autónomas, aprovechaban alguna visita a sus familiares para pasarse por este doctor y pedirle unas cuantas recetillas. Y yo, aunque me mudé, no me empadroné en la nueva dirección para seguir teniendo a este médico tan peculiar. 
No obstante, ahora que he probado otros médicos, echo mucho de menos a este señor. Ahora vas al médico porque te duele la garganta y no tienes voz y te dicen "pues si no tienes nada" y te despachan. Y tú ahí te quedas con tu dolor de garganta y comiéndote tus mocos. 
Si necesitas una receta y no puedes acudir al horario específico... se siente; o si solo puedes ir al horario de recetas y es para consulta normal...lo mismo. Y como haya algún problema burocrático... ya te puedes despedir de ver al médico ese día, porque le da igual. ¿Y si llega media hora tarde? No se va a quedar media hora más, por supuesto. Así que a casa; o espérate una hora más que es su descanso. 

En fin, que te echaremos de menos tanto por las cosas malas que hicieron que habláramos tanto de ti, como de las buenas, que hicieron que nunca te olvidáramos, señor doctor de San Juan. 

3 comentarios:

  1. Yo todavia me acuerdo de mi medico de cuando era crio, un dia no me acordaba de su apellido, y se lo cambie con el consiguiente descojone, era el Dr.Caja y lo llame el Dr.Paquete....Que cosas, era mas majo ke las pesetas ^^.

    Rekis estuvo aki !!

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  2. Ja, ja. No me parece nada gracioso, si era un chiste es muy malo.

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