jueves, 28 de marzo de 2013

El baño danés

Porque una imagen vale más que mil palabras: 


Esto es lo que me he encontrado en la mayoría de las casas danesas. Un aseo de toda la vida, al que le han agregado una alcachofa de ducha y voilá, baño completo. Con inventos así, no hace falta fregar el suelo, ¡se limpia cada vez que te duchas! Lo mismo con la taza del váter y el espejo. Todo como los chorros del oro, jajajaja. 

martes, 26 de marzo de 2013

SKAT

Ayer fui a SKAT (Hacienda española) a preguntar dudas sobre mi maravillosa empresa. Pero hoy no voy a echarme flores sobre ello, sino que quiero dar a conocer mi versión sobre la burocracia danesa y sus servicios para el ciudadano.

El edificio está a-tomar-por-culo.com. En un sitio que no pone ni el nombre de las calles ni hay un alma en ninguna parte. Solo coches, parece otro país. Por suerte el edificio es inmenso y se ve de lejos, porque yo ya estaba a punto de volverme a ver si me había pasado la calle.

Una vez ahí lo típico de los edificios gubernamentales enormes. Dónde coño está la entrada, dónde coño tengo que ir a preguntar. Qué coño digo, blahblah.

Por suerte, cuando estaba ahí, había un pobre inmigrante más perdido que yo dando una chapa increíble en inglés y la señorita diciéndole que fuera a la página de skat.dk y el tipo erre que erre que no quería. Y me dio tiempo a pensar.

Hablé en danés. Soy una crack. Y me dieron un ticket para esperar. Tipo INAEM. Y una vez ahí la típica gente danesa, que saben que te hace falta ayuda, pero si no preguntas directamente no te ayuda ni el tato. Pero como ya los conozco, ya me encargué yo de preguntar todo clarito cuarenta mil veces.

Y nada, que como no te puede ayudar la misma persona para diferentes cosas, me redirigieron a otro numerito y a esperar otro tanto. Y tanto. Total, para no hacer nada más que el tonto. Y lo típico de que cada funcionario te dice una cosa. Genial.

Pero bueno, simpáticos. Muy organizados. Unos 40-50 minutos de espera en total. No ayudan mucho, pero hacen las cosas que tienen que hacer. Te preguntan por tu vida y cómo coño vas a vivir. Como si lo supieras. Como si pudieras vivir en Dinamarca sin tener un pastón debajo del brazo antes que nada...



lunes, 25 de marzo de 2013

Spanish Connection v/ Esther Sebastián

Mi empresa es 100% legal. Ya está creada. Ya lo sé todo. POR FIN. Toda la burocracia hecha y aclarada.

Soy algo parecido a autónoma. No soy autónoma porque en Dinamarca no existe la figura como tal, sino la de una empresa con una sola persona. Voy a escribir el nombre solo para deleitarnos la vista: 

ENKELTMANDSVIRKSOMHED (21 letras) = NEGOCIO INDIVIDUAL (17 letras + espacio)

Ya puedo empezar a promocionarme y buscar encargos con tranquilidad. LinkedIn, Twitter, Facebook, Blogs, página web, todo internet a mi alcance muahahahaha

Ya puedo hacer facturas y pagar 1/3 de lo que gane a HACIENDA, yuhu! Viva Dinamarca! Aunque por lo que he entendido hasta que no gane más de 3000 euros al año no tengo que pagarlo. Y hasta que no gane más de 7000 tampoco tengo que pagar IVA. Y yo pensando que el país comunista este me iba a sablar lo que no está escrito. Y es gratis. 

Mejor que en España. 

Pero tranquilos, que me iré a tomarme unos cafés a casa para mandar algo del dinero que gano aquí ahí. 


sábado, 23 de marzo de 2013

¿Me han aceptado en la KU?

Yo esperaba una respuesta para el 1 de mayo, o más tarde. Pero ayer, de repente, abrí el correo al mediodía y vi un mensaje que me asustó. Algo de la Københavns Universitet. Pensé al principio que no quería abrirlo, que sería algo malo, que habría problemas con mi título español, o que faltaría algo de información, más problemas, vamos. Pero leí las primeras líneas, algo como que había información sobre mi application. Puf. Problemas, seguro. Y en el mensaje no decían nada más. Había que descargar un documento y ver qué coño pasaba. 

Me habían aceptado. Así. Sin más. Sin problemas. Sin preámbulos. Claramente. Que por favor confirmara que quería cursar el programa. SLUT. 

Increíble. Tengo un título de BACHELOR español, sin proyecto ni research  ni hostias, que los españoles somos muy chulos. Unas prácticas por ahí apuntadas cutres y tonterías que he hecho, nada más. Y no ha habido problemas. 

Así que creo que voy a pasar aquí 2 años. Estudiando un Máster en inglés titulado IT and Cognition. Mezcla de lingüística (poco, porque de esto ya sé), psicología e IT. A ver qué sale. 

Como el futuro en España como profe está cortado, habrá que buscar salida en otra parte. Sin embargo, aún no me creo que después de todo lo que he pasado, haya un lugar donde me hayan aceptado sin poner ninguna pega. Tan fácil. Increíble. Danmark




viernes, 22 de marzo de 2013

Yo no me depilo las piernas

No es una cuestión de hippie o de feminismo. Simplemente no me gusta. Lo he hecho muchas veces con mil métodos (a ver cuál ha sido más doloroso) porque no me gusta el pelo en el cuerpo. Y ya que le he dicho a tantos tíos que se afeiten la cara, a veces me gusta dar ejemplo. Solo a veces. 

Pero, como he dicho, es doloroso. Y el dolor me gusta menos que lo que me desagrada el pelo en el cuerpo. Hasta el día que descubrí las cuchillas, es cierto. Pero entonces encontré otro enemigo: la pereza. 

Hace dos o tres años no tenía mucho problema porque siempre llevaba pantalón largo, una cuestión de gustos. Pero un día se me pasó por la cabeza comprarme una falda corta y llevarla sin pantalones debajo y ahí empezó la historia, supongo.

El primer día dejé mis piernas nuevas como las de una niña de 5 años (digo 5 para no pillarme los dedos, que luego hay muchas cosas por el mundo) y no pensé más en el caso. Pero conforme pasaban los días (a la semana o así) me di cuenta que lo que fácil se va, fácil viene. Pero a quién le importa. E iba yo más feliz que una perdiz.  

Y nadie dijo nada. 

A veces pensaba que la gente era muy respetuosa y solamente hablarían a mis espaldas del tema. Pero ya con más confianza, vi que la gente no veía los míos, solo los suyos. Y aun proclamando mi rebeldía (oh, qué mayor soy, no me afeito las piernas en 2 semanas), a la gente le hacía gracia porque mis pelos son más rubios que los suyos.

PERO, aquí en Dinamarca, donde los hombres tienen el pelo más rubio que yo (de todo hay también) volvía a tener dudas sobre qué hacer. Había oído que aqui las chicas no se depilan, pero yo me he fijado y nunca he visto a nadie con ninguna mata de pelo en ningún sitio. Y me depilé las piernas.

Y la pereza volvió a hacer de las suyas. 

Y un día, con mis largos pelos, me dijeron "tú no tienes pelo en las piernas". Conclusión: a las chicas no les molesta mi pelo, los chicos están mirando otras cosas con más atención como para dedicársela a algo tan banal. 



miércoles, 20 de marzo de 2013

24 horas

El día tiene 24 horas.

7  horas para dormir (importante)
1 hora para despertarse e ir a la escuela de danés.
3 horas en clase de danés.
1 hora para comer.
2-4 horas de dar clases al día de español + 1 o 2 horas de ir hasta sus respectivas casas.
5-8 horas para preparar clases / aprender cómo funciona una empresa / hacer facturas / hacer contabilidad / hacer más y más variados papeles para la empresa / buscar más clientes / preparar textos y traducciones / mejorar la página web / informarse sobre las leyes / intentar no recibir multas por hacer las cosas mal / volverse loco...
1 hora para cenar (vamos a ser exagerados y relajados jajaja)


¿Cuándo voy a descansar? Mi vida es el trabajo y el danés. Para ni siquiera poder pagarme una casa. Es cierto, tal vez debería volver a España y llorar.

Pero no estoy tan mal. Gracias a toda la gente que se ha preocupado tanto por mí estos días. Y gracias por las ofertas y consejos. Pero estoy bien, mejor que en España. Me siento afortunada de poder estar aquí, fuera de la depresión de los telediarios de las cadenas estatales y autonómicas, fuera de las cifras del paro.

Conozco gente (aquí en Copenhague y en España) que proclaman que es imposible "sobrevivir" en ningún sitio con menos de 1000€ al mes. Yo he estado viviendo con 300€ y menos muchos meses y me siento afortunada de poder reírme en la cara de todos esos. No me hace falta más. Más dinero al menos. Tal vez más tiempo sí que me haría falta. Pero bueno.

lunes, 18 de marzo de 2013

Políticamente correctos

Lo que voy a escribir aquí es lo que no cabe en este post de eseblis i danmark.
Y mañana se me olvidará.

Es muy curioso como los daneses tratan siempre de ser políticamente correctos cuando hablan y no atacar a nadie. Pero cuando estas situaciones suceden no puedo evitar quedarme callada y observar cómo reaccionan en circunstancias parecidas, en las que su cultura choca con otra, y no se dan cuenta porque dan por hecho que los demás son como ellos.

Así pues, un danés puede defender a muerte a musulmanes o poner en la mesa las miserias e injusticias de los suburbios de la India, y no darse cuenta que la persona que tiene enfrente de su mesa ha cogido comida del suelo para comer porque no tenía dinero para comprar comida; o que comer (me refiero a la comida, eso que se hace en España entre la 1 y las 4.30pm) delante de un español sin ofrecerle/invitarle/obligarle a sentarse contigo al menos es un insulto más grande que decirle "hijo de puta, vete a tu país".

Creo que los daneses viven bien. Demasiado bien. Tal vez eso te atonta un poco. Algo malo tenía que tener el Estado del Bienestar. Piensas que todo el mundo está de puta madre, igual que tú. Piensas que eres muy listo y comprometido con los más desfavorecidos sacando a relucir estas cosas. Tal vez hasta donas 100DKK al año por estas causas. Y te sientes de puta madre en tu sofá, en tu butaca del avión, en tu hotel de 5 estrellas en Tumbuktú. Y no conoces a la persona que tienes delante.

Es más cruel que esas niñas ( y no tan niñas ) que te dicen que les sobran 2 kilos (=200 gramos en lenguaje mujer) y que están muy gordas cuando a ti, joder, se nota, te sobran igual 15 o 20. Un respeto, joder, mirad con quién estáis hablando antes de dar una patada en la boca al prójimo. No tiene más misterio, que una no viste de Prada, que si no tengo un smartphone de 200 euros es porque no puedo, no porque no quiera, que llevo medias con agujeros, joder. No tengo ni pa' pinturas pa' un puto dibujo. En fin.

Un respeto y cerrad la puta boca. Muy tolerantes, muy abiertos, muy correctos, pero también muy ciegos, muy ingenuos y muy hirientes. Políticamente incorrectos.

No se puede negar que me ha molestado mucho ese comportamiento, pero me encanta observarlo sin intervenir. Si yo digo "eh, puedes ofrecer", estoy destruyendo la magia, si yo digo, "¿sabes con quién estás hablando?" No tiene ningún valor. Ya no es danés en estado puro, ¿no?

Qué grandes son las lecciones de "hay palabras que duelen más que los golpes físicos" por un danés; cuando él mismo está demostrándomelo en el acto. He aprendido la lección. Lo peor es que llevo aprendiendo esta lección (y la otra también, para qué engañarnos) 25 años y 21 días.

martes, 12 de marzo de 2013

resultados del IELTS

Después del susto de que no me llegara el correo el viernes y poco antes de comenzar a emparanoiarme con el estúpido y absurdo cartero de la zona de Lyngby*, he recibido los resultados del IELTS. Yo quería un 8, porque sí, sin más, porque ya que pago 200 euracos por esa mierda de examen, qué menos que un 8. De hecho, salí bastante contenta del examen oral, yo me habría puesto un 8, joder, que hablé muy bien. Sé que tengo acento español, y me gusta, porque no sé si alguien lo habrá notado (por eso de escribir en español de vez en cuando, más que nada) soy española, y no soy como esos españoles que se avergüenzan de ser españoles, que leo últimamente mucho en foros; a mí me hace mucha gracia cuando la gente descubre que soy española y dicen cuatro tonterías en español (joder, me hace hasta ilusión) o cuando un danés que llega tarde me dice "como los españoles, tarde, mañana, mañana". Pues sí, me parto la caja, porque no tienen ni idea, y porque son más parecidos a nosotros de lo que creen (sí, ellos se parecen a nosotros, porque los españoles somos más chulos que un ocho) y tiran de tópicos. ¿Quién conoce un tópico danés? ¿Quién conoce Dinamarca? País que empieza por D.

En fin, que me había salido bien el speaking y fui muy animada al escrito al día siguiente (y menos mal que iba animada, porque fue como un campo de concentración). La que cuidaba el examen creo que se apellidaba Hitlersen y la jovencita creo que se llamaba Adolfinette, porque jodo, cómo estaba el patio. El listening fue terrible, una cosa exagerada de rápido, pero no de cómo hablaba el casette sino entre ejercicio y ejercicio, es que no podías descansar ni un segundo la mente, no tenías ni tiempo para pensar en qué coño estabas escribiendo, nada. Debías ser una máquina de procesar listening y producir respuestas. Pero en fin, me volví loca un rato pero recuperé el control. Decente. El reading no era difícil, no había problemas de vocabulario, pero los textos eran increíblemente largos. Y las preguntas bastante revueltas y rebuscadas, pero bueno. Iba bien de tiempo hasta el final, que se me echó encima y las tres últimas respuestas me las inventé en 30 segundos antes de tener que dejar los lápices sobre la mesa. OK. Putada pero OK. Y, por último el writing, joder, no tenía tantas ganas de salir de una sala desde antes de que pueda recordar, solo pensaba en mear, sinceramente. Y acabar. Y fueron dos redacciones bastante mediocres. La primera muy cutre pero se supone que valía poco, y la segunda pasable, pero yo creo que sin fallos garrafales.

En fin, que en el reading tuve un 8.5. OK. Es decir, ¿solo fallé esas 3 preguntas que no me dio tiempo a contestar? En el listening tuve otro 8.5 O.O Yo pensaba que me había salido de culo, pero se ve que no perdí tanto la concentración como yo pensaba. Muy bien. En el writing tenía un 6.5, menuda mierda con patas. Era muy mediocre, pero al menos un 7 yo me habría puesto, no jodas. Y lo peor, en el speaking tenía otro 6.5. Qué cabrones, mi oral era de 8, de 7,5 me habrían parecido agarrados. ¿¿¿Pero 6.5??? ¡Quién coño pone las notas de estos exámenes? Hablé de puta madre. En fin, daneses. Estaba por quejarme, pero todos me dicen que pa' qué, si con un 6 entro de sobras en la uni.


A la mierda. Nota media de toda la broma: 7,5/9. Ya está hecho. Próxima aventura:

selvstændig


* En serio, ese señor es el puto amo. A mí me reparte el correo siendo que mi nombre no está en la puerta porque, según mi casera, se llevan muy bien y ya sabe que hay estudiantes en su casa (y no marido, yo que sé). Tal vez hagan sus cosas juntos, no sé, pero a otra gente en vez de ponerle el correo en su casa, se la echan al vecino. Porque sí. Porque él lo vale. 

domingo, 10 de marzo de 2013

Bicis de los cojones

Otra vez. Otra maldita vez. Otra estupidísima vez. GRRRRRRRRRRRRRRRRRRR

El tiempo recuerda a Zaragoza. Sopla el viento plácidamente, aquí es una cosa exagerada, pero el tiempo es agradable. Son los pequeños detalles los que importan, ¿no? Las calles están secas, las ramas de los árboles en el suelo, las señales se tambalean y es totalmente inútil peinarse por la mañana porque en cuanto sales a la calle ya no sabes ni dónde te hiciste la raya del pelo. 

No hace falta decir lo malo que ha pasado. Putas bicis danesas de los putos cojones de cristo. Estoy hasta las narices de los putos pinchazos y los putos problemas. Putas bicis chulas de los cojones, que funcionan muy bien y son muy cómodas, pero me cago en cristo y los putos problemas que tienen. Desde luego, aquí las tiendas hacen un gran negocio con las putas bicis rotas. Esto está amañado seguro, estúpidos daneses simpáticos que no se enteran de lo que les timan los putos moros de mierda. Que arreglan las bicis de mentira, porque todas se joden. Verga. Coño.


Es una bici de muestra. Porque si le hago fotos a todas las bicis que he tenido ya, me quedo sin memoria en disco. 

viernes, 8 de marzo de 2013

El que ríe el último, ríe mejor.

I dag har jeg grædt. Det var godt, faktisk. Det var en lang tid siden sidste gang jeg græd. Måske plejer jeg at blive forsømt. Men det er dog stadig svært, når jeg ved, de hjalp andre mennesker, de vil ikke hjælpe mig.  

I dag har jeg husket, hvorfor jeg aldrig bede om hjælp. Fordi jeg venter på dem, og jeg gør ikke, hvad jeg nu skal gøre. Og endelig få jeg ikke noget, og jeg bliver SKUFFET. Skuffet er ordet, der jeg føler altid. 

Jeg er skuffet med min forældre, som de er med mig. 
Jeg er skuffet med min lærere fra skolen, fordi de så ikke noget.
Jeg er skuffet med min skolekammerater, som elskede mig bare for deres interesse, og jeg vidste det. 
Jeg er skuffet med de drenge, der sagde, at de elskede mig, men de ville bare sex.
Jeg er skuffet med Spanien, men ikke for krisen, men for ikke at tage, hvad de havde med mig.
Jeg er skuffet med mig selv, fordi jeg stoler altid de andre.

Undskyld. Men mennesker og lande har aldrig givet mig noget, og hvis jeg ikke har lyst til det, give jeg ikke nogen noget. Jeg har fået nok.



martes, 5 de marzo de 2013

Rugbrød


Esta cosa con tan mala pinta es pan de centeno. Es un pan que comen los daneses en lugar de comer pan de toda la vida. La primera vez que lo probé sabía como si estuvieras masticando la madera de la mesa. Pero no en seco, sino después de haberla dejado a la intemperie y bajo los elementos escandinavos (lluvia, nieve, viento, frío, y sol negro) durante uno o dos años. Dale un bocao a eso y sabrás a qué sabe el Rugbrød

A los daneses no les gusta que diga eso, que son muy suyos y se sienten insultados. ¡Es solamente un pan! A mí el pan tradicional español me sabe a goma de neumático, y ningún español (ni siquiera los amantes de este pan) se han sentido tan traicionados como un danés pueda sentirse jamás. Pero bueno...

El problema es que ayer comí Rugbrød, me gusta sentirme integrada y nunca está de más hacer esfuerzos por rubios altos y guapos. Coño, que llevo 5 meses en Dinamarca, todas las cosas danesas que pueda hacer son pocas. Me lo comí, como digo... y me lo tragué. Creo que nunca había conseguido hacerlo antes. Y... me supo bueno. Sabía bueno. Bueno, bueno, vamos a ver, tampoco TAN bueno, pero digamos que era comestible. No era pan blanco, ni era ambrosía, y hay que reconocer que todavía conservaba un poco ese regustillo a intemperie, pero era comestible e incluso agradable. 

En fin, que o yo me he vuelto loca (cosa que sucede muy a menudo) o Dinamarca me está cambiando el paladar. ¡Todo sea por la aventura danesa!

domingo, 3 de marzo de 2013

sol de Dinamarca



El color del sol en Dinamarca. Es tan raro tan raro tan raro que es NEGRO.

Foto tomada a las 4 de la tarde a través de la webcam.